En el Bosque de Noche
El viento hiriente se abre camino entre los
árboles, el aire las atraviesa como una guadaña, haciendo temblar de miedo el
corazón de Mimizuku. La pesadez que la envuelve en tales circunstancias se puede describir con una sola palabra: Oscuridad. Sin embargo, no es una oscuridad completa. La inmensa
luna llena que se cierne en el cielo nocturno
por encima pareciese casi tan brillante, como si fuese una ilusión. Pero la luz
de la luna hace resplandecer los colores de la oscuridad más suntuosamente.
Durante el día, el bosque es un lugar de césped exuberante, pero en la
oscuridad pareciese que todo se retorciera, de la misma manera que tentáculos enmarañados
moviéndose entre sí.
-‘‘Uf’’
Mimizuku dejó escapar un chillido cuando sintió
un dolor intenso. Mirando la parte posterior de su mano, vio una línea
horizontal roja pasar por el. Había sido herida. Sus pies desnudos y sus
hombros también tenían numerosas heridas que se entrecruzaban a través de
ellos.
‘‘Ehehe…’’
Mimuzuku emitió una débil risa mientras lamia la
parte posterior de su mano. Ella saboreó la sangre. Tenía un tinte salado
cuando su lengua llego a tocarlo, pero entonces se volvió ligeramente dulce. La piel humana es agradable, Mimizuku
pensó. Me pregunto si sería agradable
comerlo. Ella pensó, los árboles y las hojas del bosque golpearon su piel
abriendo nuevas heridas.
Tener todos estos
cortes me hacen sentir tan cálida.
Era feliz. Después de todo, era mejor estar tibio
que frio. Está bien. Está bien.
En ese momento, una rápida ráfaga soplo, y el
frágil pelo de Mimizuku susurró de la misma manera que la hierba marchita. Era un viento
extraño. Aunque causo que su corto pelo bailara por todos lados, las hojas de
los arboles no hicieron sonido en absoluto. Con ojos de sanpaku y sus pupilas
como guijarros de carbón, observo arriba hacia la dirección del viento.
Esas lunas….
Allí ambas eran, un par perfecto.
Rasgando hoyos enormes a través de los cielos,
parecían un par de ojos por sí mismos.
Miraron fijamente a Mimizuku.
Rebuscando entre el bosque, Mimizuku se preguntó
lo que mirarían por encima de los árboles.
Son tan hermosos.
Sintió escalofríos que le recorrieron su espina
dorsal. Magnifico. Si ella fuera más corta, no habría sido capaz de verlos en absoluto. A pesar de esto, la mala
vista que tenia de ellos ahora era suficiente para paralizarla. Mimizuku
levanto sus mejillas con sus manos y dio
una pequeña risa ahogada. Era casi como si un tipo bien parecido la mirase
fijamente. Pero no era un hombre.
No es humano, es diferente. Diferente de un ser humano… pues bien, cualquier cosa
que sea, espero que sea algo que me
comería.
Levanto su mano y tratando de tocar la luna, pero
no había manera que ella podría alcanzarla. Estaba bien sin embargo, porque las
lunas no era un lugar que los seres
humanos podrían alcanzar.
‘‘¡Hey, allá arriba, ustedes las hermosas lunas! Mimizuku
grito tan alto como sus diminutos pulmones pudieron lograr. ’’
‘‘¿Ustedes pueden… no comerme?’’
Las dos lunas comenzaron a balancearse de un lado
a otro. El corazón de Mimizuku empezó a latir mas rápido.
‘‘Permiso, humano’’
Una voz resonó, el estruendo sacudió la oscuridad
desde sus raíces.
Escuchar la voz hizo feliz a Mimizuku, hizo una
gran sonrisa abierta y descarada.
Soy tan feliz, pensó.
‘‘Salid. Me desagradan los humanos’’
Aborrezco, odio. Odio a los humanos. Nos
llevaremos bien.
Si bien ella tenía el cuerpo de un humano, Mimizuku odiaba a los humanos.
Las lunas, el lago, las bellotas entre otras cosas, los odiaba también, pero ni
se compara tanto al odio a los humano.
‘‘¡Esta bien! Soy diferente a los humanos’’
Ella abrió sus brazos afuera tan ancho como pudo.
Los grilletes encadenados a sus muñecas sonaron de modo discordante cuando lo
hizo.
‘‘¡Soy ganado! ¡Así que cómame! dijo Mimizuku, haciendo otra sonrisa amplia y
descarada. La oscuridad susurro, y las lunas brillaron intensamente.
Es "ilusión" no "ilución".
ResponderBorrarEs "ilusión" no "ilución".
ResponderBorrarGracias por la observación.
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